La polémica saltó de nuevo en torno a la casa de Alba por unas declaraciones en las que se aseguraba que Alfonso Díez iba a recibir una serie de cuadros de alto valor para que pueda disponer de ellos libremente.
La periodista Beatriz Cortázar estuvo hablando con la duquesa de Alba y le desmintió esa información. Según Cortázar "está todo repartido" ya que "el famoso tercio de libre disposición se cambió por completo cuando se repartió entre sus hijos una porción importante de la herencia".
Beatriz ha explicado que, cuando vivía Jesús Aguirre, "por una cuestión de edad, Cayetana pensaba que él moriría después, se habló de que ese tercio de libre disposición iba a ir a su marido".
Sin embargo, desde antes de la boda con Alfonso la herencia está repartida y por eso "todo lo que ha pasado estos últimos años es público y notorio. Por eso no tiene sentido que aparezca esa información de María Eugenia Yagüe" ha señalado Beatriz Cortázar. La periodista ha apuntado que "a la gente le cuesta creer que Cayetana haya repartido toda su herencia".
La duquesa de Alba "lo ha dado todo, el tercio de mejora, el tercio de libre disposición y el tercio de legítima". Cortázar ha comentado que "la mejora fue para su hijo mayor, el duque de Huéscar, porque es el que se va a quedar con la Fundación Alba" y, al tener que manejar todo ese patrimonio, "necesitas un tercio de mejora".
También ha aclarado que "el problema viene por el tercio de libre disposición", ya que "su hijo Jacobo se quejó de que ha beneficiado a Cayetano y a Eugenia". Beatriz Cortázar ha señalado que "a Cayetano le ha dado un palacio maravilloso en San Sebastián con todo lo que tiene en el interior y a Eugenia, entre otras cosas, la estupenda casa de Ibiza".
La periodista ha indicado que "a Cayetana le duelen estos comentarios y dice que lo único que quieren es malmeter contra Alfonso diciendo que está ahí para llevarse algún cuadro". Pero "los cuadros no se pueden tocar porque pertenecen a la Fundación Alba" por lo que estarán controlados por el próximo duque de Alba que será su hijo mayor Carlos.
Federico Jiménez Losantos ha apuntado que "la única forma de hacer dinero con esos cuadros es mediante la falsificación y dándole el cambiazo". Una maniobra muy complicada que es casi imposible de poder llevar a cabo ya que "está todo catalogado, desde el Goya hasta la miniatura más minúscula".