eres así y que le vamos a hacer. He de reconocer que me falto vista, fui muy miope, que pese a haber luchado
mil batallas como esta, los años me han vuelto manso y peor aún, confiado, y ese error, hoy por hoy me ha
costado tanto, tanto, que casi no lo puedo asumir y peor aún, me ha costado más, mucho más gestionar.
Por todo lo anterior, si ves que alguna vez tengo el seño fruncido y estoy o sigo ausente, no es por ti, es
porque cada vez que nos cruzamos una mirada, caminamos en un pasillo o coincidimos en alguna estancia
dentro del despacho, me es inevitable sentirme idiota.
Que le voy a hacer, nunca pensé que las cosas sucedieran así, nunca pensé que llegaríamos hasta aquí y
nunca pensé que mis sentimientos se desbordaran así y por ti.
Hoy por hoy la realidad me apabulla; darme cuenta tarde que me usaste a tu antojo, duele mucho,
enterarme que me mentías sin ningún tipo de consideración, duele aun mas,
pero el enterarme que mientras yo te llenaba de cariño y eran otros los que al final se quedaban con el
fruto de mis cuidados y mis mimos, eso ya me aniquilo el alma y me hace sentir dos veces más idiota.
Con todo lo anterior, que quieres que te diga, que esperas?
¿Donde quedan los días en que cualquier cosa era una excusa para estar juntos?
¿Donde quedan tantas horas de cariños y mimos?
¿Donde quedan tantos besos robados al margen de mis circunstancias?
¿Donde quedan las locuras que he hecho para estar contigo?
Solo me queda saber que estuve allí cuando mas lo necesitaste, estuve allí para rehacerte, sacarte
adelante, cuando estabas deshecha, estuve allí para celebrar tus logros y diluir tus penas, simplemente
estuve allí para todo lo que quisiste.
Solo me queda saber que hubo un momento en que nuestras almas conectaron y eso no te lo esperabas.
Solo me queda el saber que estuve a tu lado sin condiciones y por encima de las circunstancias.
Solo se que mis actos fueron fiel reflejo de mis sentimientos.
Solo se que fui honesto a la hora de entregarte mi cariño.... y con eso me quedo... esto, no me quitaras tu, no me lo quitara nadie.
Quedan atrás los días de tribulación, los días en los cuales estuve a punto de jugarme mi vida, matrimonio,
mi hogar, mi reino, mi estabilidad, mi todo y plantearme una vida entregado a ti y a tu lado, siempre a tu lado.
Solo se que por un tiempo encarnaste el amor verdadero.
Solo se que viví un sueño que rozo la realidad.
Solo se que mientras estuve contigo fui mas que feliz...
Vienen ahora mas cambios, dejaremos inevitablemente de vernos, mucha suerte y
le pido a Dios que te ilumine el camino y seas feliz, pero siempre ten en cuenta que:
Nadie como yo, sabrá ver en ti; en las cosas que haces, en las que dices e incluso en las que piensas,
esa mujer especial, la mujer mas espectacular, que he conocido jamás.
Juan Charrasqueado