Una tragedia que "afecta de manera muy directa a mí y a mi familia. Recuerdo a Silvia cada año y cada momento", aseguró a los micrófonos de En casa de Herrero.
José Luis de San Pío relató cómo sucedieron los acontecimientos para él aquel fatídico día: "Estaba en un pequeño restaurante en Madrid cerca de la oficina y los propietarios del local me avisaron, conocían mi vinculación con Nueva York. Mi primera reacción fue de que era ciencia ficción, pero conforme pasaron los minutos me di cuenta que era una realidad".
El padre de la única víctima española de la tragedia, que tan sólo tenía 26 años entonces y que, además, estaba embarazada –su marido compartía oficinas con ella y también falleció-, aseguró que su única preocupación era por su hija, ya que sabía que estaba en el piso 92 de la torre norte y mirando hacia la parte alta de Manhattan, donde se estrelló el avión. "Vi que estaba muy cerquita de donde tenía la oficina. Mi única esperanza es que no hubiera ido a trabajar con motivo de su embarazo. Cuando tomé contacto con su familia, al cabo de un rato me confirmaron que sí que había ido y por tanto debía estar allí".
Preguntado por si tenía la certeza de que la joven había muerto en el atentado, José Luis siempre lo tuvo claro. "Si ella estaba en la oficina, sí. Conocía la oficina, sabía la orientación y sabía que era imposible. Un avión de ese tamaño cubre más de un piso". Inmediatamente hizo los preparativos para salir a Nueva York, aunque los vuelos estaban ya "todos cerrados". "Yo llevaba en mi fuero interno de que Silvia se había ido".
A pesar de ello, y de que "dicen que la esperanza es lo último que se pierde", cuando habían pasado dos o tres días, "un 98 por ciento de mi cuerpo me decía que eso no tenía remedio, y aunque una pequeña parte se resiste, cuando llegué y supe detalles, no habiendo noticias, tuve que aceptar lo inevitable".
José Luis tuvo también duras palabras contra los asesinos que perpetraron la masacre y contra los actos de terrorismo en general. "El terrorismo es odioso, el resultado de una ideología totalitaria marxista revolucionaria, y busca objetivos políticos a base de atacar la sociedad para que reaccione y ellos justifiquen el seguir atacando. Se nutre de la injusticia social que existe", diagnóstico en En casa de Herrero. Aseguró también que no le importa que se recuerde a su hija, "teniendo en cuenta que la situación es irreversible, y no tanto por ella personalmente o por sus familiares, sino porque es un acto de terrorismo brutal".
Sobre la reciente muerte del terrorista Ben Laden, responsable del 11-S, José Luis se alegró "especialmente de su desaparición", una "ejecución legal conforme a la ley americana", y aclaró que usa ese término "no en plan eufemismo", aunque no se puede alegrar de la muerte de ningún ser humano. "Para muchos supuso pasar página, por otro está la circunstancia de que no es más que un acontecimiento y que no obstante el terrorismo va a seguir".
José Luis sigue siendo incapaz de volver a la Zona Cero. "He hecho varios viajes a Nueva York y he evitado ir a la Zona Cero". Y asegura que "hay mucha gente que ha ido y lo entiendo, hablo desde un punto de vista estrictamente personal".